La colecistitis enfisematosa es una manifestación poco frecuente, comúnmente asociada a la colecistitis aguda complicada por microorganismos productores de gas. Un trabajo realizado en el Reino Unido ha tenido como objetivo describir las características clínicas y patológicas de la colecistitis enfisematosa en gatos.
Se realizaron búsquedas en las bases de datos de 32 centros de referencia de Medicina Interna de Pequeños Animales dirigidos por diplomados europeos, ubicados en el Reino Unido e Irlanda. Se identificaron y revisaron retrospectivamente cinco casos de colecistitis enfisematosa felina confirmada.
Los principales signos clínicos incluyeron inapetencia (100 %), vómitos (80 %) y letargo (60 %). Las principales anormalidades en el examen físico fueron ictericia (60 %), malestar abdominal (40 %) y organomegalia (40 %). Las anormalidades de laboratorio más comunes fueron leucocitosis (rango de aumento de 1,12 a 2,3 veces), linfopenia (rango de disminución de 0,4 a 0,93 veces), aumento de la actividad sérica de alanina transaminasa (rango de aumento de 2,02 a 11,72 veces) e hiperbilirrubinemia (rango de aumento de 4,8 a 18,58 veces).
Por otro lado, las imágenes abdominales, incluyendo ultrasonido o tomografía computarizada, mostraron conductos biliares intra y extrahepáticos dilatados y focos de gas luminales y/o intraluminales en todos los casos. El cultivo bacteriano identificó un crecimiento moderado de Corynebacterium spp. en un caso y Enterococcus spp. en otro caso. Tres gatos sobrevivieron y fueron dados de alta tras la colecistectomía; dos de ellos recibieron estabilización médica antes de la cirugía. Lamentablemente, dos gatos fallecieron; uno recibió tratamiento médico y el otro, quirúrgico, sin estabilización médica previa.
“Esta es la primera vez que se describe colecistitis enfisematosa en una cohorte de gatos”, indican los autores. Así, indican que merece la pena considerarla como un diagnóstico diferencial poco frecuente en gatos que presentan un aumento de la actividad sérica de la alanina transaminasa y de la bilirrubina. También añaden que la estabilización médica con antibióticos, seguida de colecistectomía, puede ofrecer un pronóstico favorable.