La tiña o dermatofitosis es una infección cutánea que causa un hongo y afecta a la piel, tanto de los animales como de las personas, dándose en cualquier parte del cuerpo.
Suele ser frecuente en perros y gatos que pasan mucho tiempo fuera de casa. Además, el hecho de bañar con mucha frecuencia a las mascotas hace que sean más susceptibles a contraer la tiña, pues el baño elimina el sebo protector de la piel. Por otra parte, se contagia por contacto directo o indirecto con el animal afectado y causa alopecia, ya que los cabellos de las zonas infectadas se rompen y la zona se inflama. También son frecuentes las escamas y la caspa en la lesión.
El posible contagio y el riesgo zoonótico hacen que el diagnóstico rápido de la dermatofitosis sea importante en los animales de compañía.
Por ello, el objetivo de un trabajo realizado en Australia ha sido el de comparar la eficacia de varios métodos diagnósticos. Los autores probaron la impresión con cinta adhesiva (ATI), el tricograma, el examen con lámpara de Wood (WL) y el cultivo de hongos. Para realizar el trabajo, se utilizaron 5 perros y 15 gatos con lesiones consistentes, antecedentes y al menos dos resultados positivos en pruebas de dermatofitos.
Después del examen de lámpara de Wood, se tomó una muestra de una lesión representativa por paciente para ATI, tricograma y cultivo fúngico. La detección microscópica de elementos fúngicos en impresión con cinta adhesiva y tricograma se comparó objetiva y subjetivamente. Además, la capacidad de todas las pruebas para detectar correctamente la dermatofitosis y la capacidad de ATI y tricograma para detectar elementos fúngicos en campos de visión aumentados al máximo se compararon utilizando pruebas matemáticas.
Los resultados revelaron que la impresión con cinta adhesiva, tricograma, cultivo fúngico y la lámpara de Wood fueron positivos en el 100 % (20 de 20), 90 % (18 de 20), 95 % (19 de 20) y 65 % (13 de 20) de los pacientes, respectivamente, con una diferencia significativa entre WL y ATI.
El cultivo fúngico reveló Microsporum canis (n = 16), Nannizzia gypsea (n = 1), Trichophyton mentagrophytes (n = 1) y T. rubrum (n = 1). Los elementos fúngicos se detectaron con mayor frecuencia con ATI (18 de 20) que con tricograma (11 de 20), y la detección requirió un escaneo cuidadoso para distinguirlos de los restos de fondo con mayor frecuencia con tricograma. Los elementos fúngicos se localizaron con grupos de neutrófilos y balsas de queratinocitos, además de fragmentos anormales de cabello, con mayor frecuencia en la impresión con cinta adhesiva.
En resumen, “la impresión con cinta adhesiva tuvo la mayor capacidad para diagnosticar correctamente la dermatofitosis y una mayor facilidad para detectar elementos fúngicos en comparación con el tricograma”.