WSAVA difunde un vídeo educativo sobre el síndrome obstructivo respiratorio de los braquicéfalos

Los miembros del Comité de Enfermedades Hereditarias (HDC) de la Asociación Mundial de Veterinarios de Pequeños Animales (WSAVA) y otros expertos explican en un video “con carácter educativo” cómo la apariencia de las razas de hocico corto se han visto afectadas por criarlos para una conformación anatómica extrema y exagerada.

Los perros braquicéfalos son los que tienen el hocico “achatado”. Según la WSAVA, “no son perros felices ni sanos, pues se pasan la vida esforzándose por respirar, y muchos necesitan operarse. Algunos fallecen a causa del Síndrome Obstructivo de las Vías Respiratorias Braquiocefálicas (SORB)”.

La asociación expone en el video que el SORB se trata de “una patología obstructiva de las vías respiratoriasque se genera por un aumento en la resistencia de las vías aéreas, caracterizada por una nariz estenótica, cornetes y nasofaringe turbinados, prolongación del paladar blando y eversión de los sáculos laríngeos”.

Por ello recomienda no seguir criando perros con este problema, porque sufren “afecciones devastadoras debido a sus rasgos anatómicos exagerados”.

Los problemas, según los miembros de la WSAVA, no solo se limitan al ámbito respiratorio, sino que también sus numerosas arrugas y pliegues oculares pueden dificultarle la visión. Además, si el perro padece sobrepeso los problemas respiratorios se acrecentarán, según los expertos.

Nai-Chieh Liu, de la Universidad Nacional de Taiwán explica que “estos perros también pueden padecer infecciones crónicas del oído por tener canales auditivos estrechos, vómitos crónicos por su esfuerzo para respirar y dificultades durante el parto debido al gran tamaño de la cabeza”.

Pero según ella es el SORB el mayor problema de estos perros. Comparte junto a otros miembros de la asociación que debe fomentarse la cría de perros de esta raza con rasgos menos exagerados para que puedan vivir felices.

Ake Hedhammar, miembro del WSAVA y profesor titular en la Universidad Suiza de Ciencias Agrarias, comenta que los veterinarios tienen la capacidad de detectar este problema en los perros y deben oponerse a la cría de esta raza. “Para ello no solo deben trabajar los veterinarios, sino también los dueños, los jueces de espectáculos caninos, los criadores, y los medios de comunicación, con el objetivo de influir en la percepción”.

También los investigadores, Jane Ladlow y Dan O´Neill, del Grupo Síndrome Obstructivo de las Vías Respiratorias Braquiocefálicas   de la Escuela Veterinaria de Cambridge, y el Real Colegio de Veterinarios de Londres, respectivamente, también hacen hincapié en la necesidad de actuar contra su cría para que los próximos perros de razas como los pugs, bulldog francés e inglés no padezcan el mismo problema.

O’Neill advierte que el SORB aparece en una proporción 30 veces mayor en estas razas que en el resto.

Jerry Bell, presidente de HDC, expresa que “los criadores no seleccionan a propósito perros con dificultad para respirar, pero no hay duda de que la crianza de perros con bozales cada vez más cortos ha creado serios problemas de salud en estas razas”.

Con sus declaraciones, los expertos esperan ayudar “a educar a los criadores, propietarios y todos aquellos involucrados o que influyen en la crianza y el cuidado de los perros de nariz corta. También esperamos que les brinde consejos útiles sobre los pasos que pueden tomar para ayudar mientras trabajamos juntos para resolver un problema grave de bienestar. Todos los perros merecen vivir vidas saludables. No debemos defraudarlos”.