La Dirección General de Salud y Seguridad Alimentaria de la Comisión Europea ha señalado que las autoridades competentes de Italia realizan los controles adecuados para supervisar el cumplimiento de los requisitos del Reglamento (UE) 2019/6, cuyo objetivo es combatir la resistencia a los antimicrobianos mediante un uso más prudente de los antimicrobianos, según recoge el informe de la auditoría que se llevó a cabo en el país entre el 9 y 20 de enero de este año.
El objetivo general de la auditoría fue confirmar la idoneidad de los controles de las autoridades competentes exigidos por el artículo 123 del Reglamento (UE) 2019/6 del Parlamento Europeo y del Consejo. La auditoría se centró exclusivamente en los controles de determinadas disposiciones relativas a los medicamentos veterinarios antimicrobianos.
Finalmente, no se han formulado recomendaciones a partir del informe emitido por la Dirección General de Salud y Seguridad Alimentaria.
Tal y como recoge el informe, las autoridades competentes italianas han proporcionado “información exhaustiva como prueba de que son responsables y ejecutan los controles sobre el cumplimiento de los requisitos del Reglamento sobre medicamentos veterinarios”. Dicha información incluye, entre otros, documentación sobre la planificación e implementación del plan de control, el uso de bases de datos y los registros de controles e inspecciones, incluidas las listas de verificación.
“El Ministerio de Salud ha elaborado el Programa Nacional de Control de Medicamentos Veterinarios 2024-2026, con base en el Decreto, para verificar el cumplimiento de los requisitos del Reglamento sobre medicamentos veterinarios y la legislación relacionada”, apunta el informe. En este sentido, este programa abarca todas las etapas de la cadena de medicamentos veterinarios en el ámbito de la auditoría e incluye: criterios para la realización de controles basados en riesgos; sistemas que respaldan las actividades de planificación; ejecución e informe de los controles; procedimientos operativos documentados con instrucciones para el personal; y soporte técnico e informático.
El Decreto también establece que los controles de los productos veterinarios deben realizarse de conformidad con los principios, criterios y procedimientos establecidos en el Reglamento (UE) 2017/625 del Parlamento Europeo y del Consejo, sobre controles oficiales.
Finalmente, el documento concluye que los controles sobre la prescripción y el uso de antimicrobianos están bien diseñados e implementados, mediante una red integral de sistemas informáticos. “Esto ayuda a las autoridades competentes a contribuir a un uso más prudente de los antimicrobianos mediante el cumplimiento de los requisitos pertinentes de los medicamentos veterinarios”, remata.
En Europa, la categorización de antibióticos es una recomendación de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), clasificándolos en función del riesgo que su uso representa para las resistencias antimicrobianas. La mayoría de los países de la Unión Europea (UE) siguen estas recomendaciones, pero de forma voluntaria.
En un estudio preliminar realizado por la Organización Colegial Veterinaria (OCV), de los 15 países de la UE de los cuales se han obtenido datos, doce lo hacen de forma recomendada (Alemania, Austria, Bélgica, Croacia, Dinamarca, Eslovenia, Grecia, Irlanda, Luxemburgo, Países Bajos, Portugal y Rumanía), mientras que sólo tres países (Francia, Italia y Suecia), las implementan de forma obligatoria.
Aunque estos tres últimos países presentan condiciones similares a las de España, existen algunas diferencias que les han permitido flexibilizar, en cierta medida, el uso de antibióticos. En Italia, por ejemplo, las categorías C y D pueden utilizarse sin restricciones ni necesidad de justificación.
Sin embargo, la OCV advierte que, en España, el Ministerio de Agricultura ha establecido uno de los marcos más restrictivos para el uso de antibióticos en Veterinaria de toda la UE, basándose en el informe de ventas y uso de la EMA, y argumentando que en el país existe un mayor uso de antibióticos que en otros países de la Unión.