La fiebre del Nilo Occidental (FNO) es una zoonosis causada por determinadas cepas del virus del Nilo Occidental (VNO) transmitidas por mosquitos. El contagio se produce principalmente a través de la picadura de mosquitos pertenecientes en su mayoría al género Culex, en particular Culex pipiens, pero es posible que también participen, aunque en menor medida, otros artrópodos ya que se han detectado garrapatas, moscas y piojos infectados con este virus. La mayor parte de las infecciones humanas se producen por esta vía.
Un alto porcentaje de infecciones por VNO son asintomáticas (80 %). En caso de presentarse clínica, la manifestación más severa de la infección es una encefalitis que ocurre tanto en humanos como en caballos.
El virus de la FNO es en la actualidad el Arbovirus más extendido en el mundo, encontrándose presente en todos los continentes excepto en la Antártida. En los últimos años, el virus ha aparecido en forma de brotes epidémicos con una alta proporción de casos graves en regiones templadas de Europa y América del Norte, convirtiéndose en una amenaza emergente de salud pública y animal en estas zonas.
España presenta en la actualidad una situación endémica de la enfermedad debido a que reúne unas condiciones favorables para el mantenimiento y la circulación del virus responsable de la FNO, como son la gran variedad de posibles reservorios, la proximidad a zonas endémicas como África y Oriente Próximo, las características ecológicas y climáticas, las rutas migratorias de aves procedentes de áreas afectadas y la presencia de vectores competentes ampliamente difundidos por la geografía española.
Desde comienzos de 2024 hasta el 4 de diciembre fueron confirmados casos en humana en varios países de Europa, entre ellos 138 casos en España, cuya distribución geográfica se muestra en el siguiente mapa.
Este 2025, de acuerdo con los datos disponibles del ECDC, hasta la fecha solo se han notificado casos humanos de fiebre del Nilo Occidental en tres países: Italia, Grecia y Rumanía. Sin embargo, dada la creciente actividad vectorial, "es probable que se detecten nuevos casos en los próximos meses", advierten las autoridades sanitarias.
Entre los años 2010 y 2016 se detectó el linaje 1 del virus de la FNO en aves y en diversas explotaciones equinas de Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura y Castilla y León. En octubre de 2017, se detectó por primera vez en España el linaje 2 del virus en un ave, azor común, que presentaba sintomatología clínica en la provincia de Lérida. Se trataba de la primera detección de este linaje en España, que había sido encontrado en Europa central desde 2004 y posteriormente en Italia.
En los siguientes mapas se representan los focos de FNO confirmados en los períodos 2017-2021 y 2022-2025, respectivamente.
En el año 2022 se confirmaron en España 8 focos de FNO en équidos, (3 en Badajoz, 1 en Cádiz, 1 en Valencia y 1 en Tarragona) y 9 focos en aves, (1 en Ávila en un buitre leonado, 1 en Cádiz en un águila imperial ibérica, 4 en Lérida en tres azores y otra especie sin determinar, 1 en Salamanca en un azor y 2 en Tarragona en 2 azores).
En el año 2023 se declararon en España 38 focos de FNO en équidos, 12 de ellos mediante vigilancia activa en animales centinelas, y los otros 26 por vigilancia pasiva. Respecto a las aves, se detectaron 19 focos en total, 4 focos mediante vigilancia activa (1 halcón cautivo, 1 pato de engorde, 1 azor común y 1 búho real), y por vigilancia pasiva 15 focos en aves silvestres (3 águilas imperiales, 1 águila real, 1 búho chico, 7 azores comunes, 1 milano real, 1 gaviota patiamarilla y 1 buitre leonado).
En 2024 se confirmaron en España 68 focos de FNO en équidos, 13 de ellos mediante vigilancia activa y los 55 restantes mediante vigilancia pasiva. Por otro lado, fueron detectados 18 focos en aves silvestres, 1 de ellos mediante vigilancia activa en una perdiz roja, y los otros 17 mediante vigilancia pasiva, en 1 ibis eremita, 5 águilas imperiales, 4 azores, 1 alcatraz, 1 gavilán, 1 alimoche, 2 cárabos, 1 gaviota argéntea y 1 lechuza.
Hasta el 30 de julio de 2025 se ha notificado únicamente un foco en équidos bajo el marco de vigilancia pasiva, en la provincia de Almería.
De los resultados filogenéticos obtenidos hasta la fecha sobre aislados de diferentes años y zonas geográficas de virus VNO circulantes en España por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, se puede concluir que los datos moleculares y epidemiológicos sugieren que la primera introducción del VNO en la región del Mediterráneo occidental, posiblemente fue a través de aves migratorias.
Asimismo, los aislados de VNO caracterizados en España entre 2007 y 2016 se distribuyen en al menos dos clusters dentro del grupo de aislados del oeste mediterráneo (Wmed-1 y Wmed-2), de los cuales el cluster Wmed-2, causante de los primeros aislados españoles, parece haberse extinguido, al menos de nuestro territorio, al no agruparse en él ninguna secuencia posterior a 2008.
Además, explican que el virus no necesita nuevas introducciones desde otros territorios para producir nuevos brotes, dado que se mantiene la circulación de forma endémica en la península ibérica.
Los estudios filogenéticos sugieren al menos 2 introducciones en España desde otras zonas del Mediterráneo. Actualmente están presentes en España el linaje 1 en el centro y sur peninsular y el linaje 2 en la zona nordeste.