En los últimos años, el panorama del conocimiento y la información ha evolucionado rápidamente, lo que ha requerido la adaptación tanto de estudiantes como de educadores. El auge de las redes sociales modificado la forma en que las personas, especialmente las generaciones más jóvenes, acceden y consumen información. Esta transformación se extiende a los entornos educativos, donde estas redes pueden cumplir diversas funciones pedagógicas, como la difusión de contenido, la interacción enseñanza-aprendizaje y la mejora de la motivación de los estudiantes. Si bien existen varias plataformas de medios sociales disponibles para fines educativos, como Instagram, TikTok, Twitter, Pinterest, Facebook y YouTube, su efectividad puede variar significativamente. Si bien la pandemia de COVID-19 aceleró la adopción de ciertas herramientas digitales para la educación en línea, también llamó la atención sobre otras, como los medios sociales, que anteriormente no se habían utilizado ampliamente con fines educativos. Actualmente, el aprendizaje combinado, que combina la instrucción en línea y presencial, es un enfoque pedagógico en crecimiento que aprovecha las ventajas de los recursos digitales.
Para mejorar el aprendizaje y la motivación de los estudiantes, es imperativo aprovechar el potencial de los nuevos dispositivos digitales, como tabletas y teléfonos inteligentes. Las investigaciones sugieren que los estudiantes pueden sentirse insatisfechos y desconectados cuando se exponen a métodos de enseñanza obsoletos, incluso cuando se utilizan tecnologías relativamente tradicionales, como PowerPoint. Los sistemas de aprendizaje mejorados por la tecnología (comúnmente conocidos como aprendizaje basado en la web o aprendizaje basado en Internet) y, más recientemente, el aprendizaje móvil (M-learning) han ganado una adopción generalizada, ofreciendo la ventaja de acceso en cualquier momento y en cualquier lugar. La ubicuidad de los teléfonos inteligentes y los dispositivos móviles, con aproximadamente 6.8 mil millones de teléfonos inteligentes activos y 16.8 mil millones de dispositivos móviles a nivel mundial en 2023, es indicativa de su potencial para la educación. Los dispositivos portátiles actuales sirven no solo como una herramienta de comunicación, sino como instrumentos para la vida social y profesional, y una poderosa herramienta para realizar estudios académicos.
En este sentido, es importante reconocer que la implementación de herramientas de aprendizaje digital, que dependen de la infraestructura tecnológica, la conectividad de red y el acceso a dispositivos digitales de alta calidad, puede exacerbar la brecha digital entre los estudiantes desatendidos, desfavorecidos, marginados y oprimidos. Las desigualdades digitales asociadas con la pobreza se pueden observar incluso en países desarrollados, aunque tienden a ser más pronunciadas en las regiones menos desarrolladas.
Por lo tanto, la sociedad en su conjunto, incluidas las partes interesadas como los gobiernos, las instituciones educativas, los estudiantes, los educadores y los ciudadanos, debe abogar por la equidad digital, que ahora es esencial para garantizar un acceso justo e inclusivo al panorama emergente de la educación digital.
La creación de contenido digital se considera una valiosa tarea de aprendizaje para los estudiantes. Asignar tareas innovadoras a los estudiantes los transforma de consumidores pasivos a productores activos de conocimiento.
En este contexto, las redes sociales desempeñan un papel importante en la vida de los estudiantes como fuentes de entretenimiento, pero también ofrecen oportunidades sustanciales para desarrollar competencias educativas. La adopción de tecnologías y recursos de aprendizaje en línea en la educación veterinaria está aumentando a un ritmo cada vez mayor.
El marco europeo DigCompEdu (el marco europeo para las competencias digitales de los educadores) se propone promover las competencias digitales entre los educadores, centrándose en áreas como la participación profesional, los recursos digitales, la evaluación de la enseñanza y el aprendizaje, y el fomento de las competencias digitales de los estudiantes.
Carlos C. Pérez-Marín, de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Córdoba, ha buscado explorar los hábitos de los estudiantes en relación con las redes sociales, y en particular con Instagram, para analizar su potencial como herramienta para mejorar el proceso de enseñanza-aprendizaje en el contexto de temas de reproducción animal. Se espera que esto proporcione información valiosa sobre las aplicaciones educativas de Instagram y su papel en la educación moderna.
El presente estudio se llevó a cabo a lo largo de tres años académicos. Se creó una cuenta de Instagram dedicada, “UCOREPRO”, como herramienta de formación para estudiantes de veterinaria. Esta iniciativa fue concebida como un medio para proporcionar contenido académico complementario e interacciones con los estudiantes durante las sesiones prácticas. La cuenta fue ampliamente promocionada por el profesor entre los estudiantes de reproducción animal durante los años académicos 2020-2021, 2021-2022 y 2022-2023.
Se realizó un seguimiento continuo de las métricas de uso de Instagram. Se realizó una encuesta voluntaria de 35 preguntas para recopilar información sobre el uso educativo de la tecnología de los teléfonos inteligentes, los hábitos en redes sociales y la cuenta de Instagram de UCOREPRO.
La integración de Instagram como herramienta educativa tuvo una acogida positiva entre los estudiantes de veterinaria. Los datos de la encuesta revelaron que el 92,3 % de los encuestados encontró el contenido atractivo, con un 79,5 % reportando una mejor comprensión del tema y un 71,8 % adquiriendo nuevos conocimientos. Los estudiantes sugirieron mejoras como publicaciones más frecuentes e inclusión de incentivos académicos. Las preocupaciones sobre la privacidad y la distracción digital estaban presentes, pero no superaron los beneficios percibidos.
Cuando se les pidió que calificaran la actividad en una escala de 0 a 10, los encuestados le dieron una puntuación promedio de 7,1 ± 1,5, lo que sugiere que la actividad propuesta fue interesante para los estudiantes, pero sigue siendo mejorable.
Por otro lado, el uso de videos cortos y estrategias de microaprendizaje resultó particularmente efectivo para captar la atención de los estudiantes. En general, Instagram se consideró “una plataforma prometedora para mejorar la motivación, la participación y el aprendizaje informal en la educación veterinaria, siempre que se mantenga una integración reflexiva y objetivos educativos claros”. En general, los estudiantes expresaron opiniones positivas sobre la iniciativa y sugirieron algunas maneras en que podría mejorarse como herramienta educativa.
Así, las principales conclusiones han sido que los estudiantes informaron sobre numerosas características positivas de UCOREPRO, como su capacidad para despertar su interés y atención en la reproducción animal, facilitar la comprensión del currículo, proporcionar nuevos conocimientos, motivarlos a participar en las explicaciones del profesorado y conectar con redes profesionales. Otro punto a tener en cuenta es que “las cuentas educativas de Instagram ofrecen información a estudiantes de todo el mundo, con diferentes perfiles personales, pero con un nivel de curiosidad similar”.