El Gobierno de Asturias ha comunicado que continuará desplegando sus políticas de respaldo a la ganadería, la agricultura y todo el medio rural. Dentro de estas políticas, se puede observar que el presupuesto de 2024 incluye 12,7 millones para sanidad animal, lo que supone 7,3 más que en 2023. En este sentido, el Principado destaca la partida de un millón para bonificar el coste de retirada de animales de la explotación por Proygrasa.
Asimismo, a finales junio se iniciará el plazo para la convocatoria de ayudas de planes de mejora, con la novedad de destinar una específica para afrontar inversiones medioambientales, eficiencia energética y bienestar animal, que alcanzará hasta el 85% de subvención. También se prevén 2,5 millones para indemnizaciones por daños de fauna salvaje (un incremento de 500.000 euros respecto a 2023). En este sentido, destacan que esta es una partida ampliable.
Por otra parte, desde el Gobierno recogen algunas de las iniciativas ya adoptadas previamente por la Consejería de Medio Rural y Política Agraria, como es el caso de la partida extraordinaria para vacunar gratuitamente a toda la cabaña ganadera contra la lengua azul o las ayudas que, en el primer semestre de este año, se convocarán para contribuir a paliar los efectos de la enfermedad hemorrágica epizoótica, con un crédito ampliable de tres millones. Asimismo, recuerdan que han puesto en marcha una campaña gratuita de identificación de caballos menores de 12 meses mediante microchip y pasaporte, como exige la nueva normativa nacional.
Por otra parte, Asturias ha aprobado una declaración institucional de respaldo al medio rural en la que expresa “tanto su comprensión con el malestar de agricultores y ganaderos como la exigencia de que la Unión Europea (UE) reduzca su presión burocrática sobre el sector”, señalan.
En este sentido, consideran que “el medio rural es clave para impulsar la década del cambio y la edificación de la Asturias del futuro”. Asimismo, señalan que “la Política Agraria Común (PAC) también es indispensable” y añaden que, “sin su existencia, con el cuantioso volumen de recursos que distribuye, la supervivencia de numerosas explotaciones agrícolas, ganaderas o forestales se vería en peligro”.
También reivindican el pastoreo y la ganadería extensiva, que "han sido, y siguen siéndolo, decisivos para la conformación del paisaje asturiano y la conservación de la biodiversidad”.