Confirman el meloxicam como terapia de apoyo al tratamiento del carcinoma urinario en perros

El carcinoma de células uroteliales (CCU) es la neoplasia más común del tracto urinario en perros. A lo largo de los años se han investigado múltiples modalidades de tratamiento para el tratamiento del CCU canino, como cirugía, quimioterapia sistémica, radioterapia e inhibidores de la ciclooxigenasa (COX).

Los medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE) se utilizan principalmente por sus efectos inflamatorios y analgésicos al bloquear la producción de prostaglandinas (PG) a partir del ácido araquidónico (AA) mediante la inhibición de las ciclooxigenasas-1 y -2 (COX-1 y -2). También han demostrado actividad antitumoral contra una variedad de tipos de tumores, incluido el carcinoma de células uroteliales.

El meloxicam, un inhibidor selectivo de la COX-2, ha demostrado efectos antiproliferativos y proapoptóticos en células cancerosas caninas in vitro e in vivo.

En este sentido, el objetivo principal de un estudio retrospectivo fue evaluar la eficacia del meloxicam en combinación con mitoxantrona o vinblastina como tratamiento de primera línea para el CCU canino no resecable. También se evaluó la gravedad de los efectos adversos (EA) gastrointestinales asociados con esta combinación de tratamientos.

LA DIARREA ES EL EFECTO ADVERSO MÁS COMÚN

Un total de 28 perros cumplieron los criterios de inclusión, 21/28 perros recibieron mitoxantrona y meloxicam, y 7/28 recibieron vinblastina y meloxicam. En todos los casos se administró meloxicam a dosis de 0,1 mg/kg vía oral cada 24 h. La respuesta tumoral (TR) y los EA se evaluaron según los criterios del Veterinary Co-Operative Oncology Group.

El criterio de valoración del estudio fue el tiempo hasta la progresión del tumor (TTP). El grupo de mitoxantrona indujo un 24% de respuesta parcial y un 62% de enfermedad estable, mientras que el grupo de vinblastina indujo un 14% y un 86%, respectivamente.

La mediana de TTP fue de 84 días (mitoxantrona y meloxicam, 70 días; y vinblastina y meloxicam, 178 días). La presencia de enfermedad metastásica disminuyó significativamente la TTP. Se notificaron EA gastrointestinales en el 21,4 % de los pacientes, siendo el más común la diarrea de grado 1-2.

Los resultados del estudio “sugieren que el meloxicam en combinación con mitoxantrona o vinblastina son opciones de tratamiento de primera línea bien toleradas para el CCU canino no resecable”, y “ofrecen beneficios clínicos similares a los de la combinación con piroxicam”.

Además, agregan que “el meloxicam es un AINE alternativo potencial para el tratamiento del CCU canino”. Sin embargo, “se necesitarían más estudios con un tamaño de muestra más grande y un grupo de control para confirmar estos hallazgos y evaluar la incidencia de EA no gastrointestinales”, concluyen los autores.