El mayor homenaje a las víctimas Covid, “cambiar las políticas sanitarias hacia la prevención”

El Plan Estratégico de Salud y Medio Ambiente (PESMA) coordinado por el Ministerio de Sanidad y redactado en colaboración con el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico, busca ser una “herramienta de gestión adecuada para afrontar los grandes desafíos ambientales de nuestro tiempo”, anunciando que el objetivo principal será “promover entornos saludables que ayuden a conseguir los objetivos de salud de la población y disminuir los riesgos derivados de los factores medioambientales y sus condicionantes, disminuyendo la carga de enfermedades e identificando nuevas amenazas”.

Además, en los ejes transversales se recoge el enfoque One Health afirmándose que “es poco práctico aislar la salud humana de otras áreas como la seguridad alimentaria, las zoonosis, la microbiología y resistencia a antibióticos, la virología, etc.” apostando por un enfoque multisectorial.

Sin embargo, a pesar de que en el plan se reconoce que las enfermedades zoonóticas tienen un alto impacto en la salud humana y unas consecuencias nada desdeñables en materia social y económica, a lo largo de todo el desarrollo del PESMA, solo aparece la vigilancia de vectores transmisores de enfermedades sin que la salud animal, la vigilancia y las luchas contras las zoonosis estén recogidas en las líneas de actuación.

Por ello y una vez cerrado este pasado 23 de julio el plazo de consulta pública sobre el PESMA, la Confederación Empresarial Veterinaria Española (CEVE) ha presentado una batería de alegaciones centradas en que se trabaje con la red veterinaria y con los datos de salud animal y ambiental, “porque es la principal forma de prevenir enfermedades y reducir la morbimortalidad en la especie humana”, apuntan desde CEVE.

“Enfocarse solo en la recogida de los datos de salud de las personas enfermas en el sistema asistencial humano no es hablar de prevención sino solo tratar el aumento de conocimiento sobre el impacto que los factores de riesgos ambientales producen. Desde CEVE consideramos que el eje vertebrador que articule el PESMA debe ser el enfoque One Health y que cualquier proceso y línea de actuación debe tener en cuenta esta interconexión entre la salud humana, salud animal y salud ambiental”, explican.

En las alegaciones, CEVE aboga por la transformación digital que permita el desarrollo de un sistema sanitario orientado a la vigilancia y control de todos los riesgos ambientales físicos, químicos y biológicos con un verdadero enfoque One Health, apostándose por la recogida de datos de salud animal como centinela para la salud humana.

Proponen el desarrollo de modelos predictivos y preventivos de salud digital en base a los datos de salud animal y ambiental, con la creación de un sistema de alerta temprana basado en tecnologías Big Data e Inteligencia Artificial, como sustrato esencial para la construcción y gestión de un sistema eficiente y resiliente ante los grandes desafíos del siglo XXI.

También reclaman potenciar la comunicación del enfoque One Health y de la información y formación de quienes se encargan de su dispersión, “ya que todos somos destinatarios y, a la vez, actores en este enfoque global en salud”.

Por ello, en palabras de la presidenta de CEVE, Delia Saleno y desde la admiración y profundo respeto por las personas afectadas por la pandemia, “el verdadero homenaje a las personas afectadas por la COVID es trabajar y cambiar con premura las políticas sanitarias hacia la predicción y prevención, adquiriendo conciencia de que esto solo se puede hacer interconectando la salud animal y la salud ambiental con la medicina asistencial humana”.

“La prevención pasa por cambiar el modo de trabajar y reconvertir las políticas sanitarias a verdaderas políticas preventivas One Health”, concluyen.