OIE pide un enfoque multisectorial para dar respuesta a las futuras emergencias sanitarias

La pandemia de COVID-19 ha tenido un impacto en casi todos los ámbitos de la vida y para dar respuesta a esta emergencia mundial ha sido necesario un enfoque multisectorial e interdisciplinario.

En este sentido, los servicios veterinarios siguen desempeñando su papel fundamental para la sociedad, en la protección de la sanidad y el bienestar animal, y la salud pública, respondiendo al mismo tiempo a los desafíos planteados por la pandemia.

Se ha visto que los servicios veterinarios pueden desempeñar un papel importante, brindando apoyo directo para dar respuesta a la pandemia de salud pública a través de la realización de pruebas de muestras humanas de SARS-CoV-2, participando en investigaciones científicas en la interfaz humano-animal, o donando aparatos y equipos de protección.

Por otra parte, los veterinarios también contribuyen manejando las implicaciones de la COVID-19 en la sanidad animal, incluyendo las infecciones de SARS-CoV-2 en los animales de compañía y brotes en animales de peletería de granja, realizando investigaciones para comprender la susceptibilidad de las diferentes especies animales al SARS-CoV-2, o adoptando la gestión del riesgo para evitar el establecimiento de nuevos reservorios en especies sensibles.

Además, los veterinarios deben trabajar para garantizar la continuidad de las actividades, y en particular garantizar la inocuidad de los alimentos y seguridad alimentaria por medio del mantenimiento del comercio seguro de animales y productos de origen animal.

NECESIDAD DE FORTALECER EL ENFOQUE “ONE HEALTH”

En estos tiempos difíciles, la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) ha demostrado que, con el apoyo de las plataformas de tecnología de la información, puede preservar la continuidad de las actividades, tanto en la sede como en las representaciones regionales y subregionales, y con la comunidad de miembros a nivel mundial.

En este sentido, la OIE, en palabras de su directora general Monique Éloit, “continúa compartiendo sus conocimientos y fomentando la solidaridad entre sus miembros y expertos, promoviendo discusiones científicas, tomando decisiones y optimizando la colaboración con los socios”.

Asimismo, para fortalecer la preparación frente a todos los peligros (incluyendo las emergencias “Una Sola Salud” como la de la COVID-19), la OIE “desarrolla y difunde entre sus miembros, directrices basadas en la ciencia y la experiencia, con el fin de informar sobre el desarrollo de planes y procedimientos de emergencia”.

Con el firme apoyo de sus miembros, la OIE se encuentra en la “posición idónea para desempeñar su papel en el fortalecimiento de los mecanismos y estructuras de gobernanza a nivel mundial para dar respuestas eficientes a las futuras emergencias y evitar desastres”.

Y es que, según explica Éloit, “hemos observado de primera mano, el fuerte compromiso de los más altos niveles, incluyendo de la reunión de ministros de agricultura del G20 celebrada en abril de 2020 en la que se hizo un llamado al fortalecimiento del enfoque “Una Sola Salud” para estar preparados y dar respuesta a las futuras zoonosis”.

ECOSISTEMAS SALUDABLES PARA PREVENIR CRISIS FUTURAS

De igual modo, conservar y mantener los ecosistemas equilibrados resulta un componente clave en el enfoque “One Health”, y las amenazas de enfermedades emergentes, pueden reducirse si se garantizan unos ecosistemas saludables.

Por este motivo, dentro de los desafíos de hoy en día, también se destaca la necesidad de incorporar la fauna silvestre a las estrategias “Una Sola Salud”. Por lo tanto, Éloit cuenta que “la OIE involucra a sus miembros expertos en fauna silvestre, en el desarrollo de una estrategia a largo plazo para garantizar que la sanidad de la fauna silvestre sea integrada totalmente a las estrategias “One Health” y de sanidad animal de la OIE”.

Asimismo, la organización también “apoya la iniciativa franco-alemana de crear un consejo de expertos “One Health”, destinado a brindar apoyo a la alianza tripartita (FAO-OIE-OMS) a la que el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) será asociado, en sus responsabilidades respectivas para abordar futuras crisis”.

Por último, la presidenta de la organización indica que la OIE está dispuesta a desempeñar un papel activo en el diálogo mundial y comprometerse con la comunidad internacional para garantizar una resiliencia integral. “Juntos debemos optar por un enfoque multilateral, interdisciplinario y multisectorial para prepararnos y dar respuesta a los peligros y emergencias que afrontan los servicios veterinarios de manera holística y sostenible”, concluye Éloit.