Cómo presentar un recién nacido a una mascota

La llegada de un bebé a casa implica varios meses de espera y de preparación. Los dueños de mascotas, no solo deben acondicionar el hogar, sino que también deben educar a sus mascotas, fomentando comportamientos apropiados durante el tiempo previo al nacimiento. Hay una serie de precauciones importantes que se deben tener en cuenta antes de la llegada del bebé, tanto para garantizar la seguridad del niño, la de la mascota y el bienestar del hogar.

PRIMERA INTRODUCCIÓN

La doctora Lori Teller, profesora asociada de la Facultad de Medicina Veterinaria y Ciencias Biomédicas de Texas A&M, recomienda mantener precaución con las mascotas, incluso si se confía en ellas, y gestionar la introducción del bebé a la mascota con precaución. “Lo más importante que se debe de recordar es que un bebé y una mascota nunca deben dejarse solos juntos, incluso si cree que su mascota nunca lastimaría a nadie”, destaca.

En primer lugar, las mascotas deben acostumbrase al olor del bebé antes de que éste llegue a la casa.  “Cuando nazca el bebé, pídale a alguien que traiga a casa algo de la ropa o mantas que usó el bebé mientras estaba en el hospital para que las mascotas las puedan oler antes de que le den el alta”, explica la doctora.

Una vez el recién nacido está en casa, Teller aconseja monitorear tanto al bebé como a la mascota.

En el momento de hacer la primera introducción, destaca la necesidad de estar tranquilos y muy atentos. “Siempre que sea posible, otra persona debe sostener al bebé mientras los padres prestan atención a las mascotas”, comenta. Además, “Una vez que todos estén tranquilos, puede presentar a sus mascotas al bebé. Si es necesario, lleve a sus mascotas con correa. Una persona puede sentarse mientras sostiene al bebé y otra persona puede controlar a las mascotas”. En el caso de en la casa haya varias mascotas, se deben presentar de una en una al recién nacido.

DESPUÉS DE CONOCERSE

Posteriormente, tras la introducción inicial, la doctora incide en que también hay que trabajar en mantener una relación positiva entre la mascota y el bebé. “Es importante encontrar una manera de prestar atención a su mascota mientras su bebé está despierto y activo. Quieres que tu mascota sepa que el bebé es parte de la familia y que todos pueden disfrutar del tiempo juntos”. En este sentido, explica que si solo se le hace caso al animal cuando el bebé está dormido, éste entenderá que el bebé es un factor negativo en su vida, ya que se lleva toda la atención.

Por otro lado, hay que tener en cuenta que los cambios en el hogar también pueden suponer un peligro para los animales. Ciertos juguetes para bebés, los chupetes y objetos pequeños pueden ser ingeridos por las mascotas, pudiendo necesitar cirugía para su extracción. Del mismo modo, los medicamentos, pomadas, o pañales sucios pueden ser tóxicos para las mascotas, y deben guardarse en un lugar seguro.

Asimismo, los suministros y medicamentos de las mascotas también deben mantenerse alejados del bebé. “Estos incluyen medicamentos, como el del gusano del corazón y los preventivos contra pulgas y garrapatas. Los juguetes para mascotas y los huesos para masticar tampoco son apropiados para que un bebé se lleve a la boca. Cuando bañe a su mascota con un champú medicinal, asegúrese de que esté seca antes de interactuar con el bebé”.

Aunque, desde un primer momento, la relación entre la mascota y el bebé vaya bien, hay que tener en cuenta que el comportamiento de los animales es difícil de prever, ya que la presencia de una persona desconocida puede poner la mascota al límite, explica Teller. En este sentido, el dueño debe estar atento a las señales de la mascota, gruñidos, ruidos o si intenta interactuar con el bebé de una manera negativa. “Cualquier tipo de interacción negativa debe detenerse de inmediato. Si su mascota está actuando de manera agresiva, debe estar aislada y conviene hablar con su veterinario".

La llegada de un recién nacido y su seguridad es la máxima prioridad de unos padres, por eso es necesario tener en cuenta las precauciones adecuadas que ayuden a construir una relación positiva y segura con las mascotas.

Por último, Teller insiste en que hay que enseñar tanto a la mascota como al niño a convivir con el otro, del mismo modo que es bueno recompensarlos por llevar un buen comportamiento y ser amables.

“Hay una enorme dulzura y belleza en ver a un niño y una mascota desarrollar una relación de cariño y cuidado mutuo”.