¿Cómo es la tendencia de las zoonosis en España en los últimos años?

Las zoonosis son enfermedades que se transmiten entre animales vertebrados y el ser humano, representando un importante reto de salud pública a nivel global. Muchas de ellas, como la rabia, son conocidas desde hace miles de años, mientras que otras, como la leptospirosis, han sido identificadas más recientemente (principios del siglo XX).

La epidemiología de estas enfermedades es diversa, con agentes etiológicos que incluyen virus, bacterias o parásitos, y con múltiples vías de transmisión, como el contacto directo con otro caso o con el animal infectado, el contacto indirecto a partir de material contaminado, la exposición a vectores o el consumo de alimentos contaminados. 

Asimismo, la sintomatología y la gravedad son muy variables, llegando algunas a ser letales. Dado que las zoonosis surgen en la intersección de la salud humana, la sanidad animal y el medio ambiente, su abordaje más efectivo se basa en el enfoque “One Health” o “Una Sola Salud”. Este enfoque holístico reconoce la interdependencia entre estos tres ámbitos y fomenta una colaboración interdisciplinaria para prevenir, detectar y responder a estas enfermedades de manera coordinada, siendo defendido a nivel internacional por las principales agencias internacionales con competencias en la materia (OMS, OMSA, FAO y ONU), a través del desarrollo de un Plan de Acción “One Health”. 

Las personas que mantienen un estrecho contacto con los animales y/o sus productos, como ganaderos, veterinarios, manipuladores de canales o dueños de mascotas, presentan un mayor riesgo de padecer este tipo de enfermedades, así como todos aquellos individuos cuyo sistema inmunitario está comprometido, como es el caso de niños o ancianos.

Enfermedades zoonóticas en España y en la Unión Europea

La vigilancia es un componente clave en la política de control de enfermedades. La recopilación de datos sobre la presencia de zoonosis y agentes zoonóticos en los animales, los alimentos, los piensos y los seres humanos es necesaria para determinar las tendencias y las fuentes de zoonosis, y evaluar si las medidas de control son sufiticientes. En este contexto, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) y el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC), por encargo de la Comisión Europea, recopilan y analizan anualmente los datos de zoonosis de todos los Estados Miembros y elaboran un informe sobre fuentes y tendencias de zoonosis, agentes zoonósicos y brotes de enfermedades de origen alimentario. El objetivo es mantener un seguimiento continuo de la situación epidemiológica de cada enfermedad para valorar la eficacia de las medidas preventivas puestas en marcha.

Una de las primeras enfermedades que recoge el informe es la campilobacteriosis, de la que destacan que es la causa más común de gastroenteritis notificada en los países de alta renta y la zoonosis más frecuente en la Unión Europea (UE), con alrededor del 5-14% de los casos, y la zoonosis más frecuente en la UE. Suele tener carácter esporádico, pero en ocasiones se producen brotes por consumo de un alimento contaminado.

En 2023 se notificaron un total de 28.820 casos de campilobacteriosis en residentes en España, de los que 56 fueron importados, siendo la incidencia acumulada de 74,3 casos por 100.000 habitantes. Al igual que en el año 2022, teniendo en cuenta sólo los casos en los que el agente etiológico se identificó, la especie que con más frecuencia se aisló fue C. jejuni con un porcentaje aproximado del 85,9 %, seguida por C. coli con un 13,7 %.

Evolución de la incidencia acumulada de Campylobacter spp. en personas, en España.

En la UE, la mayoría de las muestras procedieron de pollos de engorde (30,1 %), perros y gatos (24,5 %) y de ganado vacuno (20,2 %). Los cerdos de engorde fueron los más afectados con una positividad del 72,3 %.

Salmonelosis en España

La salmonelosis sigue siendo la segunda infección gastrointestinal más frecuentemente notificada en personas en la UE. En España, se notificaron un total de 12.134 casos confirmados de salmonelosis en 2023. Si se analiza la evolución en el tiempo, destaca el importante repunte producido en 2022 con respecto al año anterior, que se ha mantenido en 2023. Se notificaron 350 brotes de transmisión alimentaria.

En 2023, en España, se analizaron muestras procedentes de cerdos de engorde, terneros menores de un año y aves. En porcino se detectó una positividad a Salmonella spp. del 47,46 % y en bovino alcanzó el 6,09 %.

Evolución de la incidencia acumulada de Salmonella spp. en personas, en España.

Por otro lado, la listeriosis es una infección moderadamente grave producida por la bacteria Listeria monocytogenes que se origina al consumir alimentos contaminados. En 2023, se declararon en España 436 casos de listeriosis, no notificándose ningún brote de transmisión alimentaria en este año.

En la UE, en animales, de 15.422 muestras analizadas, el 2,1% resultaron positivas. El 92 % de las muestras se tomaron en animales individuales. La especie más muestreada fue el ganado vacuno con un 46,2 % del total de muestras. La especie de Listeria más identificada fue L. monocytogenes en el 56,6% de las muestras positivas.

A su vez, la infección por cepas de Escherichia coli productoras de toxina Shiga o Vero (VTEC) se declaró en España un total de 840 casos y 3 brotes de infección por VTEC en 2023. “En España, el programa de muestreo en animales se lleva a cabo cada dos años. En 2023 se tomaron muestras en 193 lotes de terneros menores de un año y en un 23,3% de las muestras se aislaron 1 o más cepas de E. coli VTEC”, explica el informe.

Respecto a la tuberculosis, en el ganado bovino español la prevalencia ha ido disminuyendo hasta el año 2015, cuando se produjo un importante repunte, que se mantuvo en 2016. Sin embargo, en 2017 empezó de nuevo un ligero descenso progresivo, que se ha ido manteniendo hasta el año 2023, en el que el porcentaje fue del 1,50 %.

Un total de 22 casos de brucelosis en España 

La brucelosis es una enfermedad zoonótica bacteriana de distribución mundial causada por microorganismos del género Brucella. En los países desarrollados, la enfermedad está bastante controlada y el número de casos en personas no es muy elevado. En 2023, en España, se notificaron un total de 22 casos confirmados de brucelosis en personas.

En la evolución en el tiempo se observa que en el año 2017 la tasa alcanzó su máximo valor. A partir de ese año, se inició una tendencia descendente que se mantuvo hasta 2020. Posteriormente, en el periodo 2021-2023 ha vuelto a aumentar el número de casos, aunque ligeramente.

Evolución de la incidencia acumulada de brucelosis en personas, en España.

Sobre la triquinosis, el informe recoge que, en 2023, se notificaron 18 casos en residentes en España, siendo la incidencia acumulada del 0,04 por 100.000 habitantes. Todos los casos estuvieron asociados a un brote en los que la exposición común fue el consumo de embutidos elaborados con carne procedente de diversas cacerías durante los meses previos al inicio de síntomas. En los jabalíes salvajes, el porcentaje de positividad fue del 0,07 %. El mayor número de animales positivos se detectó en España (556; 0,26 %), Polonia (242; 0,11 %) y Bulgaria (128; 0,41 %).

El texto también ha publicado datos sobre la hidatidosis, recogiendo que, en España, en 2023 notificaron un total de 71 casos confirmados en humanos. En la UE, el número de casos en humanos en 2023 fue de 929 con una tasa de 0,21 por 100.000 habitantes. Los países más afectados fueron Lituania (3,1), Bulgaria (1,8), Eslovenia (0,76) y Austria (0,59).

En animales, España inspeccionó en 2023 un total de 48.903.325 unidades procedentes de varias especies animales. El mayor porcentaje de positividad se detectó cerdos de engorde no criados bajo condiciones de alojamiento controladas en el exterior con un 1,5 %.

Por su parte, la yersiniosis es una infección intestinal debida, en la mayoría de los casos, al consumo de carne de cerdo cruda o poco cocinada. En el año 2023, se notificaron 1.302 casos confirmados y cuatro brotes de transmisión alimentaria de yersiniosis en España.

Toxoplasmosis congénita y rabia 

Otra enfermedad zoonótica es la toxoplasmosis, con 6 casos de toxoplasmosis congénita en 2023 en España, y destacan que “es la primera vez, con excepción de los años de pandemia por COVID-19 (2019-2020), que se supera la notificación previa anual”.

En 2023, en España, se analizaron un total de 146 muestras de las especies ovina y caprina, de las que 18 resultaron positivas a T. gondii. La mayor positividad se detectó en la especie caprina con un porcentaje del 16,7 %.

Asimismo, aunque sin casos notificados, el informe dedica un apartado a la rabia. En animales, el último caso notificado en la península fue en el año 2013. Sin embargo, en Ceuta y, sobre todo en Melilla, “la infección en animales domésticos se presenta con cierta frecuencia debido a que la enfermedad es endémica en África”.

No obstante, en los países del este de la UE todavía existen zonas donde la enfermedad es endémica y afecta a animales silvestres y domésticos. Como en años anteriores, en 2023 los animales más analizados fueron los zorros. En total se muestrearon 11.445 y 31 resultaron positivos en Rumanía (16), Hungría (9) y Polonia (6).

Casos de rabia declarados en animales, en España (península e islas) y en Ceuta y Melilla.

Las dos siguientes enfermedades son la fiebre Q y la fiebre del Nilo occidental. En España, en el año 2023 se notificaron un total de 519 infecciones en personas por Coxiella burnetii.

Sobre la fiebre del Nilo, “durante 2023, en España se notificaron 20 casos en personas por el virus del Nilo occidental, suponiendo un incremento muy marcado con respecto a los 4 casos notificados en el año 2022”.

Por último, en España, en 2023, la tasa de tularemia por 100.000 habitantes fue del 0,01, igualando el dato de 2022. Excepto el año 2019, en el que hubo un brote de tularemia y la tasa alcanzó el 0,4, las tasas de notificación se han mantenido en valores inferiores a 0,1.