Alumnos de Lugo: “Queremos que Veterinaria vuelva a ser una carrera práctica”

Durante el día de ayer, 14 de octubre, alumnos de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Santiago de Compostela (USC) se han manifestado en las instalaciones de la propia universidad para reclamar que llevan tres años sufriendo recortes, desde que comenzó la pandemia de COVID-19. Los alumnos aseguran que el primer año no tuvieron prácticas debido a la situación sanitaria, el segundo eliminaron la mitad y no se les permitió recuperarlas, y este año siguen en la misma situación. “Parece que se están acomodando a esto”, denuncian en declaraciones a Diario Veterinario.

Representantes de los alumnos creen que estas medidas son innecesarias en un momento en el que las restricciones se están retirando en Galicia y en casi todo el país. Argumentan que con más profesorado podrían realizar las prácticas sin poner en riesgo la salud, “la responsable de que falten profesores es la Xunta de Galicia, no el decanato”. Uno de los afectados nos cuenta que es desde esa institución desde donde se debe firmar la compatibilidad de los docentes, y una vez lo hagan podrán empezar a dar clase.

La protesta no es solo para mejorar las condiciones del alumnado, también la de los profesores. “Se ha reducido el personal en los departamentos y están trabajando el doble. En algunos casos hay una única persona que tiene que preparar las clases teóricas, las prácticas y que tiene que realizar su trabajo en el hospital”, manifiestan.

Según explican, las asignaturas más afectadas son Diagnóstico por Imagen, Tecnología de los Alimentos y Medicina, y Cirugía Veterinaria. Son tres materias muy visuales, y creen que están perdiendo una formación fundamental.

Desde la universidad se les ha propuesto no realizar la protesta y recurrir al diálogo, pero sostienen que ya lo han hecho y no han avanzado nada. “No podemos estar hablando otros dos meses para que se acabe el semestre y terminar en la misma situación”, remarcan. 

Los representantes opinan que “es un poco fuerte que tengamos que manifestarnos para poder estudiar”, y se muestran convencidos de que han faltado alumnos “por miedo”.