Reino Unido anuncia medidas contra las importaciones ilegales de cachorros

Más de 66.000 perros fueron importados comercialmente al Reino Unido el año pasado, según cifras de la Agencia de Sanidad Animal y Vegetal. Sin embargo, la evidencia muestra un aumento en las importaciones con pocas medidas de bienestar animal, así como la actividad de contrabando, con las autoridades fronterizas viendo un aumento de alrededor del 260 % en la cantidad de cachorros jóvenes interceptados por no cumplir con las reglas de importación de mascotas del Reino Unido, con un total de 324 casos en 2019, hasta los 843 en 2020.

Ante esta situación, para abordar el contrabando de cachorros y las importaciones de bajo bienestar por parte de criadores y comerciantes ilegales, han elaborado una serie de medidas que han sido incluidas en una consulta en todo el Reino Unido para buscar las opiniones del público y las partes interesadas.

Las propuestas incluyen elevar la edad mínima para importar un cachorro de 15 semanas a seis meses, así como prohibir la importación de perras en estado avanzado de gestación para ayudar a proteger el bienestar del cachorro y de la madre, y prohibir la importación de perros con las orejas o la cola cortada.

Además, la consulta también solicita al público y a las partes interesadas, opiniones sobre nuevas sanciones por violar estas reglas, cambios en el proceso de detención, y si las propuestas deben extenderse para cubrir gatos y hurones.

Al lanzar la consulta, desde el Gobierno de Reino Unido han explicado que el contrabando de cachorros “es una práctica nefasta y estamos decididos a reprimirla”.

“El aumento de la edad mínima de importación para los cachorros ayudará a proteger a miles de animales que ingresan al país cada año y evitará que los delincuentes busquen lucrarse con el aumento de la demanda de mascotas”, aseguran.

Además, aunque “ya tenemos uno de los regímenes de control fronterizo de viajes de mascotas más estrictos del mundo, vamos aún más lejos al evitar que alguien traiga perros que se hayan sometido a procedimientos inhumanos, como cortar las orejas o el rabo”.

Por su parte, el director ejecutivo de la organización de bienestar animal Royal Society for the Prevention of Cruelty to Animals, Chris Sherwood, explica que en los últimos años han visto un “gran aumento en la cantidad de perros que se importan comercialmente en el Reino Unido, así como en la cantidad de perros reportados por haberse sometido a procedimientos de mutilación, como orejas cortadas”.

Por ello, “estos son los principales problemas de bienestar de los perros que deben abordarse con urgencia para proteger a los animales de sufrimientos innecesarios y proteger al público de ser víctimas de los delincuentes que intentan sacar provecho del valor de estos perros”.

Asimismo, Sherwood celebra el compromiso del Gobierno para “abordar estos problemas entre muchos otros en su Plan de Acción para el Bienestar Animal, y esperamos que estas nuevas propuestas se implementen de manera eficiente para que podamos tomar medidas enérgicas contra el comercio ilegal de perros”.

Por su parte, la Asociación Británica de Veterinarios (BVA, por sus siglas en inglés), ha acogido con satisfacción las nuevas propuestas. La vicepresidenta de la BVA, Daniella Dos Santos, se ha mostrado contenta con las nuevas medidas: “Encantados de que el Gobierno haya escuchado las preocupaciones planteadas repetidamente por organizaciones veterinarias y de bienestar animal y esté actuando con decisión para reprimir el contrabando de cachorros, el corte de orejas y el corte de cola”.