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Investigadores españoles piden más estudios sobre la relación de los animales y COVID-19
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Investigadores españoles piden más estudios sobre la relación de los animales y COVID-19

Recomiendan realizar más estudios de investigación al respecto para comprender mejor los riesgos y consecuencias de la infección por SARS-CoV-2, y determinar el papel de los animales como transmisores
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Investigadores de las universidades de Burgos y de Valladolid han realizado un estudio en el que han planteado el papel de los animales como posibles transmisores del nuevo coronavirus SARS-CoV-2. Según exponen, hasta la fecha existe muy poca información al respecto. Asimismo, resaltan que tampoco se ha reportado ningún caso en animales de abasto. Sin embargo, sí que hay evidencias de animales de compañía infectados con la Covid-19, como es el caso de felinos, perros y visones, en los que la enfermedad se ha transmitido de humano a animal.


La mayoría de los coronavirus en los seres humanos afectados tienen un origen común de diferentes especies de murciélagos. En el caso del SARS-CoV-2, se especula que varios mamíferos son huéspedes intermediarios, incluido el pangolín, en el que se ha identificado una cepa de coronavirus que muestra una fuerte similitud con la propia del virus causante de la Covid-19. Pero hasta la fecha se dispone de poca información sobre la existencia de este virus en animales y la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) solo ha informado de casos esporádicos.


El primero fue el 26 de febrero 2020 en Hong Kong, un perro cuyo dueño fue hospitalizado debido a la infección por Covid-19 dio positivo por SARS-CoV-2. El animal no mostró ningún síntoma clínico específico. De manera similar, dos perros pertenecientes a un dueño hospitalizado por Covid-19, fueron puestos en cuarentena y uno dio positivo, pero no se detectaron signos clínicos. El 27 de marzo un tigre fue confirmado positivo en el Zoo del Bronx (Nueva York) y otros tres tigres y tres leones mostraron signos clínicos. Se asumió que se habían infectado a través de un empleado asintomático. Asimismo, un gato en una casa con un paciente Covid-19 en Hong Kong, fue confirmado como infectado y no mostró ningún síntoma.


En este sentido, si se ratifica la transmisión de persona a animal, se deben enfrentar 3 escenarios posibles. El primero estaría relacionado con el ganado para consumo humano, ya que, hasta ahora no se ha confirmado ningún caso en este tipo de animales. Esto respalda que los alimentos de origen animal pueden considerarse de bajo riesgo infeccioso y, como se afirma en el estudio, “una ruta insignificante de infección para los seres humanos”.


En segundo lugar, está probado que el SARS-CoV-2 puede infectar a animales de compañía, como a gatos y a perros, y hay evidencia de infección de persona a animal. Por eso, dado el estrecho contacto entre humanos y sus mascotas, los investigadores inciden en que no hay que descartar la transmisión fecal-oral.


El tercer y último escenario tiene en cuenta a los animales exóticos, que incluyen un gran grupo de especies y, además, en algunas regiones se usan como alimento. El contagio a los humanos se asoció con un contacto cercano entre hombres u animales exóticos. Por este motivo, hay un consenso general cada vez mayor para que en los mercados de animales exóticos, sobre todo en los que se venden animales vivos, tienen que estar estrictamente regulados.


Como conclusión se indica que el papel de los animales y la Covid-19 debe “analizarse cuidadosamente” a la vez que se establecen medidas de preparación y contención. Por ello recomiendan realizar más estudios de investigación al respecto para comprender mejor los riesgos y consecuencias de la infección por SARS-CoV-2, y determinar el papel de los animales como transmisores.


El análisis se ha realizado por Marta Hernández, David Abad y David Rodríguez de la Universidad de Burgos y por José María Eiros de la Universidad de Valladolid y del Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid.

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