En todo negocio veterinario (que haga las cosas bien) llega un momento en que la cantidad de trabajo comienza a ser importante y es necesario aumentar personal.
Como bien sabemos, este es uno de los costes mayores del negocio así que debemos analizar bien qué necesita nuestra clínica, si un veterinario (haciendo sus funciones) o un auxiliar.
Conozco casos en que se ha contratado un veterinario más cuando en realidad lo que pedía a gritos esa clínica era un ATV. En el fondo son una pieza clave, porque nos liberan de ciertas tareas para que podamos dedicarnos a lo nuestro, ejercer la medicina veterinaria.
En esta ocasión me acompaña Alberto Barra, veterinario con 25 años de experiencia y propietario de una clínica veterinaria y de una escuela de formación para ATV, ambas en Córdoba.
Durante nuestra charla hablamos sobre estos temas y otros muy interesantes que surgieron según conversábamos. Alberto nos dió también unos consejos super útiles para nuestros ATVs revolucionarios.
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